Mauricio encontró el rumbo. De ahora en más navegamos con viento a favor. Si quiere mañana puede titular con eso.

- ¿Está seguro?

- Segurísimo.

- Pero…

- Que costó, costó. No se lo voy a negar, pero ahora podemos cruzar el Atlántico en una hora. Sublime.

- La inflación no para de crecer, se cae el salario real, no repunta el empleo ni la actividad económica…

- Nosotros a los argentinos les decimos siempre la verdad.

- ¿Y lo del rumbo?

- Mire que es materialista, ¿eh?

- Todos los indicadores dan mal.

- Recuerde lo que dijo el santo: “No solo de pan vive el hombre”.

- Es una cita de Jesús. No lo dijo ningún santo.

- Ah, pensé que era de Bergoglio, cuando era bueno.

- ¿Y ahora qué es?

- Kirchnerista, venezolano, musulmán y de River.

- Pero si el Papa es de San Lorenzo.

- Eso dice, pero es de River. Se lo digo en off, pero si quiere póngalo en su nota.

- ¿A quien le importa algo así?

- Además de materialista, indiferente a la geopolítica. Mama mía: el periodismo militante está en caída libre.

- Sigue sin decirme en qué se basa para decir que el presidente encontró el rumbo.

- En el pensamiento positivo.

- ¿Y eso?

- Ante cada fecha sensible para los argentinos, una gigantografía en la Casa Rosada con un mensaje de amor, paz y buenas ondas.

- ¿Por ejemplo?

- Para San Valentín colgamos una de Romero y Julieta.

- Una historia de amor trágica, breve, de muerte ¿Cuál sería el mensaje positivo?

- Que lo bueno dura poco y termina mal.

- ¿Entonces?

- Entonces ahora estamos mejor que en 2015.

- No encuentro relación.

- Nosotros sí.

- Claro, pero la comunicación política se basa en que el otro también la encuentre.

- Ya, ya, ya. Me aburre.

- Usted es el que dijo lo del rumbo y el pensamiento positivo.

- Por eso mismo: su razonamiento es más negativo que Carrió cuando está de vacaciones.

- No se trata de eso, se trata de…

- Espere un momento: usted no formará parte del complot de los presos K, ¿no?

- Yo no formo parte de ningún complot, lo único que hago es preguntar.

- Por eso le digo.

- ¿Qué?

- Que en algo raro anda, porque el pensamiento positivo no necesita de la pregunta.

-¿Y cómo voy a saber si no pregunto?

- De eso se trata: de no saber.

- ¿Y cómo hago mi trabajo si no sé?

- Es que usted se quedó en 6, 7, 8 mi amigo. Discúlpeme que se lo diga así de crudo. Un Leuco, un Lanata, un Majul no necesitan saber para ser los mejores.

- No me diga que van a poner más gigantografrías.

- Ya se lo dije. En todas las fechas claves. Los argentinos merecen vivir mejor.

- Temo lo peor.

- No tema. Ahora vamos a hacer menos ingenuos. Basta de literatura, de lirismo. Hay que ser directos y efectivos.

- ¿Por ejemplo?

- Carnaval.

- ¿Qué pasa?

- Vamos a recuperar la alegría, a combatir el bajón K de que todo está mal.

- Entonces…

- Entonces la Casa Rosada se va a cubrir con la Caravana de la Pensamiento Positivo.

- No puedo imaginarlo.

- Nosotros sí, para eso estamos.

- Dígalo despacio.

- Mauricio, el rey Momo. María Eugenia, como Chucky. Y Rodríguez Larreta como Rodríguez Larreta ¿No es impactante?

- Ya lo creo.

- No se haga el irónico conmigo. Si no sabe disfrutar el arte y el pensamiento positivo… Nosotros se lo vamos a hacer disfrutar.

- Suena amenazante.

- Es el pensamiento positivo.

- ¿Amenazante?

- Diga lo que quiera. El pensamiento positivo me inmuniza de la mala onda.

- ¿Y después de Carnaval qué?

- El día de la Memoria, la Verdad y la Justicia.

- ¿Y qué van a hacer?

- Pensamiento positivo, ya se lo dije.

- Y algo más preciso…

- Sorpresa, sorpresa. El pensamiento positivo es sorpresa. Bye, bye.