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- Mauricio está eufórico.
- ¿Por?
- ¿Se acuerda de la canción de Alberto Cortez? Cuando un amiiiigo se vaaaaa / queda un espaaaacio vacíiioo…
- Sí, ya ya, que se va a quebrar la garganta…
- Bueno, el amigo se fue.
- ¿Y por qué está eufórico?
- Porque volvió ¿No es grandioso? Los argentinos estamos condenados al éxito, créame.
- No entiendo nada.
-¿Quién es el mejor amigo del hombre?
- El perro.
- ¿Y de Mauricio?
- ¿Balcarce?
- Y dale con el periodismo militante.
- Pero si usted dijo que…
- No importa lo que yo dije, sino su ironía, su sarcasmo, su verba golpista.
- ¿Y yo qué dije?
- Una fake news.
- ¿Yo?
- Sí, usted. Todos los argentinos de buena voluntad saben que el mejor amigo de Mauricio es la doctora Carrió.
- Pero si viven peleados.
- Eso era antes.
- ¿Antes cuándo?
- Antes, cuando el peronismo nos dividía, cuando el populismo utilizaba sus recursos maquiavélicos para confundirnos.
- ¿Y eso cuándo fue?
- Cuando la doctora Carrió dijo que las tarifas eran impagables, que la economía era un desastre, que en el gobierno estaba lleno de corruptos…
- Pero eso fue hace muy poco.
- Exacto. Pero la drogaron.
- ¿Cómo que la drogaron?
- Muy fácil. La doctora Carrió le pidió un té Marcos Peña y…
- ¿El jefe de gabinete le sirve el té a Carrió?
- ¿Me va a interrumpir mucho tiempo más? Mire que estamos de campaña y en 15 minutos nos vamos con Mauricio y María Eugenia a Mar del Plata. ¿Cómo cambiaron los tiempos, no?
- ¿Por?
- Antes nos íbamos a Punta del Este y ahora tenemos que ir a Mar del Plata. Pero no se preocupe. Vamos a volver.
- ¿Quiénes?
- El país pujante, atrevido, con bigote de Freddie Mercury, el que supimos ser.
- No se disperse, siga, que lo van a dejar a pie.
- Bueno, la cosa es que cuando Marquitos le dejó el té a la doctora Carrió, un comando venezolano-kirchnerista-iraní se introdujo por la ventana, le puso peperina y se le descarrilaron todos los patitos.
- ¿Quiénes estaban en ese supuesto comando?
- No se lo puedo decir. Lo está investigando Pato Bullrich.
- ¿Por qué me guiña el ojo?
- Para ver si entendió la sutiliza.
- ¿Cuál?
- Pato ayudando a acomodar los patitos.
- ¿Es un chiste?
- En nuestro gobierno los patos se ocupan de los patitos, como debe ser. ¿Se da cuenta por qué somos el mejor gobierno de los últimos 70 años?
- Pero si la peperina no hace mal. Es un digestivo natural que...
- Por eso mismo. Fue al baño y se desacomodó todo. Pero no tema. Ya somos un país sólido, duro, firme…
- No hacen falta los detalles…
- Como le decía, ella va a participar de la campaña, va a defender a Mauricio con el patito al cuello... perdón, con el agua al cuello.
- Va a ser una elección difícil para el presidente, eso es cierto.
- Esa es la otra buena noticia.
- ¿Cuál?
- Que la doctora Carrió nos confirmó que Dios no es peronista.
- ¿Y eso?
- Claro. Como nosotros somos budistas no entendíamos cómo venía la mano y pensamos que como Bergoglio le da y la da al bombo, su superior… En fin, usted se imagina…
- ¿Qué?
- Eso. Que Dios no es peronista, aunque el otro lo sea. ¡No sabe los saltos que daba Mauricio! Ahora sí que no nos para nadie.
- Pero si Dios no es peronista, quiere decir que es otra cosa.
- Exacto.
- ¿Y qué es?
- Por fin se avivó querido. Venga, deme un beso…
- Salga! ¿Qué hace?
- Bergoglio es de ellos: de Maduro, de Cristina, de Moyano… Pero Dios, el verdadero Dios, el único, es nuestro…
- …
- Un patito amarillo como usted, como Guaidó, como Lagarde, como yo ¿No es magnífico?
- ¿Y cómo sabe todo eso la doctora Carrió?
- Ah, bueno! Si usted quiere discutir de teología, yo no tengo tiempo.
- Yo solo quiero…
- Dios existe y no es peronista. Con eso alcanza y sobra. Y ahora lo dejo que me tengo que ir a probar mi patito. Mar del Plata es una fiesta. Le dejo el título y todo. ¡Bye, bye!