El gobernador Suárez, en  su discurso del 1° de mayo, elogió los supuestos éxitos del modelo construido desde 2015 por Cambia Mendoza. Los contrapuso al “populismo que viene haciendo estragos en el país”. Junto al senador Alfredo Cornejo utilizan un método utilizado por la propaganda fascista: describir males realmente existentes en la economía y sociedad argentinas, para adjudicárselos sin explicaciones a un enemigo que debe ser destruido: “el populismo”.

Suárez sostiene que en  Mendoza se “ha avanzado en todas las competencias estrictamente provinciales”, y que “ha venido haciendo todos sus deberes para pegar un gran salto de calidad”. Esos deberes son reducir la recaudación impositiva manteniendo equilibrio fiscal, para lo cual hay que reducir mucho más aún los gastos y  el tamaño del estado.  Cosa muy aplaudida por unos pocos beneficiarios privados, pero también por ciudadanos bienintencionados que se preguntan por el deterioro de la salud y la educación públicas, por la pobreza de los trabajadores estatales, por el déficit habitacional o la falta de agua en los barrios populares.

Para no quedarnos en retóricas contrapuestas, intento  mostrar lo más objetivamente posible lo ocurrido en materia de producción, trabajo y pobreza, apelando a las estadísticas oficiales.

1. La producción de Mendoza en una década

Producto Bruto Geográfico Mendoza 2011-2021. En miles de pesos de 1993. Año base 2011=100

Fuente: DEIE, Producto Bruto Geográfico. Mendoza. Años 2004-2021

Tomo como año base de comparación el último de la gestión Jaque. Los cuatro años del gobierno 2012/2015 (F. Pérez, PJ) muestran un leve ascenso en el producto total (3.3%) y una leve disminución en el producto por habitante. El periodo 2016/2019, guiado por Macri en la nación y Cornejo en la provincia, termina con el PBG total y por habitante menor al de 2011. El último dato disponible del PBG 2021 indica una producción por habitante 10% inferior a la de una década atrás.

2. La situación laboral

Los Informes sobre Trabajo e Ingresos (EPH- INDEC) muestran para los tres primeros trimestres del año 2022, una situación muy grave en el aglomerado Gran Mendoza. La presión sobre el mercado laboral, ejercida por desocupados más ocupados y subocupados demandantes, es del orden de 46%, unos 16 puntos por encima del promedio nacional. Son unas 240.000 personas, en búsqueda de trabajo, o de otro empleo, desnudando así la precariedad, baja calidad y/o insuficiencia de ingresos. 

De los ocupados, alrededor del 68% son asalariados, proporción inferior al promedio nacional y a registros históricos provinciales del orden del 74% en 2008. El paso de asalariados a trabajadores independientes  no es un signo de movilidad social ascendente, sino pérdida de empleo genuino y en blanco. La mayoría de los cuentapropistas de oficio o de subsistencia son informales.

De los asalariados el 42% se halla no registrado, es decir trabajo “en negro” (la media nacional es  37%). Ramas dinámicas de la economía mendocina tienen indicadores graves: 48% en comercio y 65% en hoteles y restaurantes.

Las invocaciones a las nuevas tecnologías y al “reemplazo de los trabajos repetitivos y de baja habilidad” resultan ficticias frente a una dura realidad. Por ejemplo, la empresa Pedidos Ya  (propiedad de un grupo alemán) oculta, tras la fascinante herramienta de la aplicación, el trabajo de unos 1.500 repartidores, una versión modernizada de vehículos “tracción a sangre”, bajo un régimen de locación de servicios. Nueva tecnología con viejas precariedades.

3. Las condiciones de vida

Los indicadores de la producción y del trabajo dejan sus huellas en las cifras de la pobreza.

Pobreza. Total 31 aglomerados urbanos y Gran Mendoza. 2do semestre 2022

Fuente: Incidencia de la pobreza e indigencia en 31 aglomerados urbanos (INDEC, 2do semestre 2022)

Pobreza en zonas urbanas 18 departamentos de Mendoza. Octubre 2022

Fuente: Gacetilla DEIE 29/03/23

Extrapolando las tasas a toda la provincia, incluyendo zonas rurales, la pobreza rondaría en torno a las 800.000 personas. Una cifra que no requiere de comentarios.

Da vergüenza ajena el desparpajo y la soberbia con las cuales Suárez y Cornejo no asumen  responsabilidad alguna por la situación provincial, reparten culpas en otros, y se ofrecen como candidatos a vicepresidente y gobernador  respectivamente. Sin abandonar mis críticas a la  orientación adoptada por el gobierno nacional, considero que sería muy grave para nuestro país adoptar el “modelo mendocino” de estancamiento productivo, precariedad laboral y pobreza social.