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Esta semana la radio, la tele, los diarios, en fin, todos trataron de explicar la peor semana del gobierno. Desde Majul a Fernández Díaz. El presidente se equivoca pero retrocede sobre el horror, los ministros no están a la altura de las circunstancias, y nadie cuida al Presidente
Cuando un ministro dice que el aumento de tarifas es igual a dos pizzas, cuando otro te sugiere que si el combustible es caro hay que cargar menos, y el de trabajo pide juicio político a jueces por dictaminar que una paritaria debe cumplirse, no es un error.
Cuando el presidente nombra por decreto a dos jueces de la Corte, o arregla beneficiosamente una deuda de su propia empresa, que por decreto viola la ley de blanqueo de capitales permitiendo que familiares de funcionarios puedan acceder cuando está prohibido por la misma ley, no es un error.
Cuando por decreto el presidente baja impuestos a las importaciones de equipos de informática que importará el socio de su padre, cuando la paritaria debe tener un techo del 17% para achicar costos laborales y ser más competitivos, no es un error. Es un PLAN SISTEMÁTICO.
Este es un partido que ya jugamos. Lo hicieron en el 76, luego en el 90 y lo consolidaron en el 2000. Ahora en dos años generaron la peor fuga de capitales de la historia de este país.
Lo peor de todo es que los socios de la UCR todavía no se dieron cuenta, ¿o son los cómplices necesarios?.
Los actores son los mismos, solo que esta vez los ministerios están representados por las empresas que hicieron y hacen negocios con el Estado.
La oposición parece tomar carrera de una vez por todas: ya comprometieron su apoyo a la marcha de la CGT del 7 de marzo el PJ, el Frente Renovador y sus aliados, la Izquierda y las organizaciones libres del pueblo.
Para terminar la semana el presidente nos dejará más tranquilos. El recibimiento del Rey de España me emocionó hasta las lágrimas, fue un momento único. El chico no tenía previsto cazar elefantes esta semana y lo recibió como si llegara el hijo de un cacique incaico.
En la cena de honor el Rey se acercó y le preguntó al presidente por que tenía presa a la hija del cacique Tupac. Mauri le contestó: mi Rey, “quiso quedarse con tierras que vosotros conquistasteis”.
En su discurso, el caciquillo prometió no volver a portarse mal con la madre patria, así que veremos qué empresa del estado podemos darle. No vaya a ser que el Rey le diga: Por qué no te Callas.