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Se cerró la etapa de instrucción de la causa ARA San Juan y fue elevada a juicio. De este modo, la jueza federal de Caleta Olivia, Marta Yáñez, procesó a seis altos mandos de la Armada.
Al mismo tiempo, se sacó del foco del proceso en el marco de la investigación al ex presidente Mauricio Macri y al ex ministro de Defensa, Oscar Aguad.
De este modo, fueron imputados Jorge Sulía, quien era jefe de Logística del Comando de la Fuerza de Submarinos; Hugo Correa, ex jefe de Operaciones de ese comando, Héctor Alonso, ex jefe de Estado Mayor del COFS.
A ellos se suman Luis López Mazzeo, titular del Comando de Adiestramiento y Alistamiento, Claudio Villamide, comandante de la Fuerza de Submarinos y Eduardo Luis Malchiodi, ex jefe de Mantenimiento y Arsenales de la Armada.
El delito que se les imputa es estrago culposo agravado por el resultado de muerte en concurso de idea, por el incumplimiento de deberes de funcionario público y omisión de deberes de oficio.
La pena que enfrentan es de 5 años, con posibilidad de excarcelación, junto con embargos que van desde los 2.000.000 a los 3.500.000 de pesos.
Claudio Rodríguez, hermano del submarinista muerto Hernán Rodríguez, manifestó la disconformidad de los familiares de las víctimas respecto a la justicia.
“Hay una corporación judicial que libera a la parte política y le suelta la mano a la Armada. La Armada se puso bajo el manto de la política, por estúpidos, y le soltaron las manos”, manifiesta Claudio.
Los familiares de las víctimas del ARA consideran que hay responsabilidades políticas. A su vez, indicaron que la próxima semana se reunirán con el actual ministro de Defensa Agustín Rossi, este martes, en el que le plantearán la remoción de la jueza Yáñez.
“Los tipos que están condenado son perejiles, son ratas, se robaron todo de la Armada. Esa negligencia los llevó a que pierdan un arma como el submarino y que pierdan a los muchachos”, expresa el hermano del submarinista.
Y Claudio añade: “En 5 años están libres, pagan 2 millones de pesos y acá no pasó nada. Por eso digo que por parte de la jueza o hay connivencia, o hay un arreglo, o le quedó grande la causa”.