La situación salarial de los docentes tiene en vilo a la provincia hace más de un mes. Miles de maestros, maestras y profesores marcharon en reiteradas ocasiones por las calles céntricas de Mendoza con un pedido concreto: una mejora salarial sustancial.

Con una situación aún peor que la de los docentes se encuentra otro sector de la comunidad educativa, los celadores. Cerca de 10 mil trabajadores de este sector padecen una compleja situación de ajuste y salarios por debajo de la canasta básica.

Ante este panorama desolador, algunos referentes del sector piden al SUTE un lugar en la discusión para poder poner en claro sus pedidos. “Vamos a hacer nuestra propia lucha y pedimos que nos dejan ingresar para que podamos saber qué negocia el gremio docente para los celadores”, explicó Miguel Sosa, referente del espacio.

“Me hablan de igualdad y de esto y aquello, pero tienen un espíritu de egoísmo”, criticó el celador ante la inexistencia de propuestas concretas para sus representados. “La última manifestación fue que no nos dan un espacio, no saben cómo están los celadores”, señaló. 

En tanto que advirtió que “el Estatuto del celador está estancado, no hay capacitación, hay compañeros apretados, perseguidos, humillados por algunos directivos de escuelas”. 

En cuanto a la situación propia de los celadores, Sosa señaló que “un celador inicial no supera los 38 mil pesos, sin carga familiar y sin título. No llegamos a fin de mes con esto”.

“Estamos muy preocupados. Esperamos que el gobierno tenga sentido común y respeto a los trabajadores. Mendoza es una provincia rica y tiene trabajadores pobres. Pedimos dignidad, reconocimiento y respeto”, sintetizó.