Decenas de familias campesinas organizadas se hicieron presentes frente al edificio gubernamental para reclamar por la crítica situación productiva y alimentaria. Nuevamente la modalidad fue un verdurazo para dar a conocer su reclamo.

La medida fue convocada en torno al Día Internacional de la Lucha Campesina que se celebra a nivel mundial el 17 de abril, a 26 años de la masacre de decenas de campesinas y campesinos de Eldorado dos Carajás (Brasil), cuando luchaban y defendían sus tierras.

Por ese motivo y a 20 años de la fundación de la UST, esta organización dio a conocer algunas de las luchas que está llevando adelante. El pedido de una Reforma Agraria Integral, como camino posible para resolver la pobreza de la ciudad y el campo, el reclamo de la soberanía alimentaria, esto es el derecho a la cultura de producción no extractiva que provea alimentos sanos al pueblo y se lleve a cabo mediante una comercialización justa, así como en la defensa del territorio, el sujeto social campesino y los derechos humanos; la lucha irrestricta por la salud y la educación popular en Argentina y América Latina.

Las familias campesinas regalaron más de 1500 kilos de verdura como forma de protesta. Quienes se acercaron al lugar se encontraron con cebollas, pimientos, ajos, zapallos y algunas frutas que se producen en la región.

“Vendemos muy barato, se quedan todos los intermediarios”, reclaman los productores. Los bajos precios que se les pagan, los costos cada vez más altos y la falta de políticas para el sector son algunos de los reclamos.

“Reclamamos varias veces, pero en el Gobierno no nos atienden”, contaron los referentes de las organizaciones. En concreto piden un avance en la regularización para poder comerciar sus producciones. De esta manera, aseguran, recibirán un mejor pago y llegará a las familias un mejor precio.