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El principal hospital de cabecera de la Zona Este no dispone de agua caliente para aseo e higiene de personal, profesionales y pacientes desde hace 15 días. Tras la ruptura de una caldera, inaugurada en 2018, el nosocomio quedó sin ese fundamental recurso.
El senador del Frente de Todos, Bartolomé Robles presentó sendos pedidos de informes, la sesión pasada y la de este martes, sin recibir respuestas favorables desde el oficialismo sobre la situación en ese efector que envió el reclamo del legislador a comisiones.
“El personal del hospital Perrupato calienta agua en pavas eléctricas para poder bañar a los enfermos y para poder atender las salas de maternidad" reclamó Robles, quien refirió además el temor de los trabajadores a represalias por la denuncia pública hecha.
Robles catalogó la situación como “lamentable” y refirió que “no ha sucedido de la noche a la mañana”. Desde 2018, la nueva caldera acarrea fallas, cuenta el legislador, que a la vez informa que las fallas constantes han producido el deterioro del circuito de agua caliente del nosocomio.
Por estas fallas, “hace 15 días, la Subsecretaría de Trabajo, por pedido de los empleados, realizó una inspección y clausuró la caldera inaugurada en 2018 por no tener las habilitaciones correspondientes y comprobó que la vieja caldera había sido desmantelada”, enumera Robles.
Desde entonces, el hospital no tiene agua caliente, y los empleados se las ingenian como pueden para la limpieza y aseo. Al mismo tiempo, el senador provincial advirtió que “muchos empleados temen represalias por hacer visible esta situación”.
Las suspicacias de Bartolomé Robles, junto con lo expuesto desde el interior del Perrupato, dan cuenta de un posible desmantelamiento del servicio de mantenimiento del hospital a fin de tercerizarlo.
Ante este panorama, el legislador de San Martín anticipa que realizarán una presentación en Fiscalía de Estado para que se investigue porqué se hizo funcionar una calera nueva sin tener las habilitaciones correspondientes y porqué todavía no funciona dejando sin agua caliente a un hospital de la envergadura del Perrupato.