_

Personal de salud de todos los efectores de la provincia y en todas sus modalidades se manifestaron por las calles céntricas, concentrándose en Casa de Gobierno exigiendo por sus bajos salarios y condiciones laborales precarias
En la primera jornada del paro general de 48 horas miles de trabajadores y trabajadoras marcharon desde Legislatura hacia Casa de Gobierno. Mientras, en los efectores de salud solo se atendieron urgencias y emergencias.
En las demás áreas y servicios la adhesión a la medida de fuerza rozó el 100%, en la antesala de este viernes, que proseguirá con la medida mientras no haya una convocatoria formal del Ejecutivo de sentarse a discutir salario en mesa paritaria.
Junto con AMPROS, a la cabeza de los reclamos, otros gremios estatales se plegaron “para lograr nuevamente una foto de unidad ante el ajuste y la mentira que busca imponer el gobierno de Mendoza”, dicen desde el sindicato de profesionales de la salud.
De espaldas a la Casa de Gobierno, los manifestantes cantaron el Himno Nacional Argentino, lo que destacaron desde AMPROS al referir la demostración de “patriotismo que no encuentran hoy en los dirigentes políticos”.
Además de la movilización que se concentró en la ciudad de Mendoza, en todos los departamentos se produjeron concentraciones a fin de visibilizar la grave problemática que viven hoy trabajadores de salud: profesionales, prestadores, contratados, becarios y residentes.
María Isabel Del Pópolo, secretaria general de AMPROS, fue una de las oradoras junto a los referentes de los gremios estatales: “Estamos más unidos que nunca en contra del atropello del Gobierno de Mendoza y nos van a seguir viendo en las calles”, refirió.
La protesta exige “un salario digno, condiciones laborales adecuadas, en contra del empleo en negro y sumas en negro que propone un gobierno oscuro, sordo y ciego”, aseguró Del Pópolo en el acto que coronó la marcha en Casa de Gobierno.
El reclamo continuará mañana viernes, por las calles del microcentro y en el Nudo Vial, en Costanera y Vicente Zapata. En caso de que el Gobierno no reabra la paritaria, “las medidas se irán endureciendo hasta que se haga justicia y llegue el merecido reconocimiento a los trabajadores”, señalan desde AMPROS.