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Una entrevista brindada por Rodolfo Suárez al medio Infobae y titulada “Independencia de Mendoza: el sistema similar al de los Países Bajos en el que piensa el Gobernador” ocupó parte de la agenda política de la semana.
¿Suárez se pliega al “MendoExit? De entrada, el mandatario asegura que “no podríamos llegar a ser independientes”; sin embargo, va más allá y asegura “yo me acercaría más a un sistema como el de los Países Bajos antes que a la independencia, y a buscar que nosotros, por tener frontera, podamos cobrar algunos impuestos. Buscaría otro sistema de coparticipación, y activar más pasos a Chile”.
En dicha entrevista, Suárez analizó el ‘independentismo’ que inundó las redes y dijo “creo que no hay un movimiento al respecto, un movimiento que tenga peso. Nosotros dependemos de la coparticipación nacional. Argentina tiene un ingreso de divisas importante que tiene que ver con la soja. Hoy, a 500 y pico de dólares, la soja es un alivio para la Argentina. En el gobierno de (Mauricio) Macri no superaba los 200. Hay un sentimiento de mendocinidad, sí, que no pasa en otras provincias. El mendocino se siente muy orgulloso de su provincia, y Mendoza sí tiene una marca”.
Ante este panorama, Suárez propone “reformular el federalismo” y señala que sería importante cambiar la matriz productiva. “Tendríamos que sacar adelante una propuesta mía que fue un rotundo fracaso, la de que haya explotaciones mineras en Mendoza. Es impresionante la riqueza que tenemos en el sur de la provincia, en oro, en plata...”.
¿En qué piensa el Gobernador?
Según explica la misma nota de Infobae, algunos territorios de ultramar pertenecientes a los Países Bajos tienen una serie de regímenes impositivos diferentes. Ante esto, Nicolás Aroma, en diálogo con Babel, analiza que “el sistema de coparticipación de impuestos no se limita al análisis tributario, es anterior y es inherente al sistema de Estado – Nación en el que vivimos”. Mientras que apuntó que “es por eso que ese sistema de transferencias y recursos está limitado al territorio, extensión del territorio, desarrollo socioeconómico de cada una de las provincias”.
Por este motivo, el especialista en Finanzas Públicas analizó que “cuando uno analiza Holanda y Argentina, no hay ningún tipo de relación, son países totalmente disímiles. Entonces se hace muy difícil pensar un sistema de coparticipación de un mundo que no es ni cerca el que vive Argentina”.
En ese sentido quien también brindó su opinión fue el consultor en eco-eficiencia, Eduardo Sosa, el cual apuntó que “para mí es una locura y solo tiene un fin electoral. El gobierno ya está en campaña hacia las PASO y las elecciones legislativas. Y necesita sumar grupos afines a su política y su ideología, y por eso coquetea con el grupo del “MendoExit” porque está buscando votos”.
Aroma agrega que “creo que es una estrategia para sacar el foco del problema real que viene atravesando Mendoza. Que es una economía que sigue en caída libre y los recursos propios de Mendoza que son cada vez menores porque la actividad económica es cada vez más chica.
Cabe recordar que en los últimos años –signados por una inflación galopante- Mendoza tuvo, casi siempre, uno de los IPC más altos del país, una desocupación que ha llegado a rozar el 10%, una deuda externa cuyos intereses comprometen las finanzas provinciales acompañados por una recaudación cada vez menor a causa de una menor actividad económica.
“Ante esa dinámica negativa de recursos, el gobernador patea la pelota hacia Nación. Y desvía el foco de atención de los problemas financieros que tiene la provincia”, sentencia Nicolás Aroma.
Desvío del foco, minería y coqueteos independentistas
Con este panorama que complejiza la situación diaria de la provincia, el gobernador busca correr el eje de discusión e insistir con la minería. Y, en ese camino, cree que para sus fines podría sumar a los “mendoexitistas”.
El “MendoExit” surgió de una humorada supremacista de redes sociales, donde un grupo de gente apuntaba que Mendoza era –en líneas generales- mejor que el resto del país porque aquí no ganaba el peronismo. “Y tenemos paisajes, y tenemos fronteras, y tenemos montaña, y tenemos vino…”, decían en las redes. Muchos de los que opinaban hablaban de la Cataluña argentina, obviamente sin un sustento histórico ni político más que el creer que “votamos o somos mejores que el resto”.
Ese es el aliado que busca Suárez en estas elecciones y busca, así, “una independencia a la holandesa”, como replicaron los medios locales. “Desde el punto de vista técnico hay limitaciones económicas y financieras. La estructura de la economía argentina es muy diferente a la holandesa. El sistema de coparticipación está establecido en la Constitución, o sea que debería haber una reforma constitucional”, señala Aroma.
Ante este disparatado análisis del mandatario, el especialista en Finanzas Públicas advierte que “creo que lo que debería pensar el gobernador es cómo integrar Mendoza de la mejor manera posible en lo económico y lo financiero. En vez de estar pensando en soluciones que no condicen con la realidad. La mitad de la población de Mendoza es pobre y hace una propuesta disparatada”.
Por otro lado, Suárez busca volver a insistir con el tema de la megaminería, que en sobradas ocasiones mostró que no cuenta con licencia social para su aplicación en esta provincia. “El gobernador se contradice porque tanto en algunos foros tanto públicos como privados, ha sostenido que la minería no es posible en este contexto aquí en Mendoza”, analiza Eduardo Sosa.
Mientras esta semana, campesinos y pequeños productores reclamaron en las calles céntricas pidiendo incentivos a la producción alimenticia y una efectiva aplicación del Plan de Ordenamiento Territorial que permita un uso más efectivo de las tierras productivas.
“Necesitamos herramientas, tecnología, muchos productores no logran acceder. Es un sector que está informalizado, necesitamos una Secretaría de Agricultura en la provincia que destine ayudas para el sector”, expresó la representante campesina Malvina Luera en dicha concentración.
Mientras que advirtió: “La producción que queda concentrada en mano de sectores empresariales, la tierra en manos de no se sabe quién y eso atenta contra la situación de los campesinos y los precios de los alimentos”.
Eduardo Sosa analizó esto y planteó que “Suárez siempre está hablando de la necesidad de cambiar la matriz productiva. Y ante esa respuesta, los números dicen lo contrario. En realidad, no hay que cambiar la matriz productiva, ni la matriz productiva está agotada. Lo que hay que hacer es reforzar la matriz productiva, diversificarla, pero con una versión de sustentabilidad, una visión de innovación, de inteligencia política”.
Aunque, apuntó que “nada de esto lo tiene el gobierno, es un gobierno de pocas ideas y poca capacidad para gestionar una crisis tan importante como la que vivimos”. Finalmente, este referente ecologista señaló que también le parece preocupante lo que Suárez hace en busca de votos “es peligroso para el gobierno coquetear con un movimiento de carácter supremacista”.