Después de haber escuchado del Poder Ejecutivo que la propuesta de incremento salarial fue de cero por ciento para el sector de la salud, la Asociación Mendocina de Profesionales de la Salud (AMProS) expuso una cantidad importante de falencias que han precarizado y desprotegido a profesionales y auxiliares de la salud.  

En la reunión de hoy, se plantearon la necesidad de un aumento salarial, debido a que la inflación no ha mermado y las condiciones económicas suscitadas por la pandemia no acompañan, además de resaltar el reclamo por la inequidad que genera el impuesto a las ganancias, que reduce significativamente los salarios del personal de la salud, pero no así, por ejemplo, el de los políticos. El personal de salud es el más afectado en todo el 2020, en el que se vieron incrementadas sus jornadas laborales sin percibir aumentos, sumado a las condiciones riesgosas bajo las que trabajan debido a la posibilidad de contraer COVID-19, el estrés constante y las largas guardias que realizan, además del poco tiempo de descanso del que disponen.  

María Isabel del Pópolo, secretaria general de AMProS, solicitó el cronograma de pase a planta, reconocimiento de los licenciados en enfermería, el recurso humano crítico para todo el personal de salud, reglamentación y cumplimiento de las guardias pasivas y los concursos que aún no han sido entregados, además del acomodo de profesionales por contacto, entre otros reclamos, siempre bajo la premisa del “atropello de los distintos efectores para con los y las profesionales de la salud”.

A raíz de la precarización, del Pópolo destacó que la falta de reconocimiento está provocando el hartazgo de los y las profesionales, que deciden migrar del sector público al privado, así como a otras provincias o países.

El personal se reunirá nuevamente el día diez de diciembre a las 15 horas para continuar con la comisión negociadora, al tiempo que piden que quien negocie sus reclamos lleve respuestas concretas para llegar a un acuerdo.